Había oscuros secretos que nunca debían contarse...
Leo Aleksandrov estaba acostumbrado a que lo obedecieran, una de las ventajas de su frialdad y falta de escrúpulos. ¿Darle explicaciones a una inocente y atractiva propietaria de una escuela infantil acerca de por qué no conocía a su hijo? No era su modo de actuar.
Contratar a Lexi Somers como niñera temporal llevó a ese magnate despiadado al l...