Ella lo pagará con dos palabras: sí, quiero.
Piper Riley se quedó atónita cuando leyó en una revista que el irresistible desconocido al que había entregado la virginidad era el crápula Dante Mancini. Aquella noche, inesperada y maravillosa, los había unido de una forma que no esperaban...
Cuando Dante se enteró de que Piper estaba embarazada, el desalmado playboy vio la oportunidad perfecta para r...